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Una odontología biológica cada vez más integral, en la que pensamos que muelas y dientes son estructuras vivas que participan activamente en la dinámica de la persona.

La odontología biológica Neurofocal, pilar fundamental dentro de la medicina integrativa. Este tipo de odontología defiende que problemas en los dientes y en toda la boca pueden actuar como campos interferentes (cualquier elemento que altere el flujo normal de la información en el organismo). Esto ocasiona impulsos irritativos en el sistema nervioso y produciendo así enfermedades en cualquier parte
del cuerpo.

En general pueden ser interferentes cicatrices de exodoncias, una pieza desvitalizada, el compromiso de la pulpa dentaria, un granuloma, los procesos osteíticos residuales, los quistes, los odontomas, los procesos inflamatorios o infenciosos, piezas en posición anómala, retenidas o semirretenidas, desplazadas o inclinidas, los terceros molares sanos sin espacio propio o en
contacto con el canal mandibular, las piezas embrionarias, los restos radiculares, las piezas utilizadas como pilares de puentes, los metales (implantes, pernos, amalgamas, ganchos, prótesis), la ortodoncia en adultos y los desequilibrios oclusales.

Damos mucha importancia a la prevención, haciendo hincapié en ciertos aspectos necesarios para alcanzar una buena salud dental:

  • Una lactancia materna es el mejor estímulo para el desarrollo de los maxilares y el paladar.
  • Una alimentación equilibrada donde se estimule al niño a masticar alimentos densos utilizando alternativamente los dos lados de la boca.
  • Un buen control y corrección de los malos hábitos (respiración oral, deglutación infantil, chupete o chuparse el dedo, etc…)
  • Una correcta higiene oral.

La rehabilitación neuro-oclusal (RNO) conduce a la boca, desde la erupción de los dientes de leche a una situación de equilibrio ayudados de la estimulación  de las propias fuerzas del crecimiento. Los tratamientos se aplican desde el nacimientos hasta la adolescencia y se controla la función de la boca durante toda la vida del paciente. Se usan métodos sencillos y no agresivos como los tallados selectivos, las pistas de rodaje y aparatos removibles que siempre dejan libre la mandibula permitiendo los movimientos de lateralidad.

Durante los movimientos de masticación la boca tiene que funcionar alternativamente por los dos lados. Las fuerzas masticatorias deben de ser soportadas por todos los dientes, habiendo un equilibrio dentario y articular (ATM) en el cierre  y en los movimientos masticatorios.

La pérdida de equilibrio produce muchos problemas en la boca pero también fuera de ella, pudiéndose encontrar dolores cervicales o lumbangias, jaquecas, mareos, vértigos, molestias en los ojos y problemas mas complejos como ansiedad, alteraciones digestivas e incluso depresión.

Uno de los campos interferentes más frecuentes son las restauraciones o prótesis  metálicas en boca. En nuestra clínica disponemos de un potenciómetro dental para poder medir los diferentes potenciales eléctricos dentales. Es un aparato de alta precisión el cual permite una medición automática simultanea de corriente (microamperios), tensión (milivoltios), polaridad y derivado de esta, el valor de conductnacia (microsimens), mediante ek empleo de dos electrodos que posee para medir la presencia de corrientes eléctricas.

Las principales ventajas del empleo del potenciómetro y las mediciones bioelectricas obtenidas de él son:

  • Facilidad en su manejo y su lectura
  • Permite una ampliación de diagnóstico clínico
  • Posibilita la obtención óptica del hallazgo en comparación a los síntomas descritos por el paciente.
  • Permite correlacionar los posibles efectos a distanciar que un campo interferente puede ocasionar
  • Ofrece la posibilidad de programar el tratamiento a seguir, teniendo en cuenta el resultado de valoración clínica, el informe neurofocal y la prioridad bioeléctrica.
  • Permite ejercer un control terapéutico más preciso.

Utilizamos materiales que disminuyen los riesgos de aparición de enfermedades. Se evitan los metales utilizando en su lugar resinas o porcelanas, composites que no son en base BIS-GMAS, es decir no contienen bisfenole.

Estamos al día de los nuevos materiales que van apareciendo en el mercado siempre teniendo en cuenta la salud de nuestros pacientes.

Trabajamos con el plasma rico en factores de crecimiento que se obtiene de la sangre del propio paciente. Con una pequeña cantidad se puede obtener de manera sencilla un concentrado plaquetario rico en factores del crecimiento que son proteínas capaces de estimular una más rápida cicatrización, regeneración o reparación de los tejidos.

Se obtiene un conjunto de formulaciones con distinta actividad terapéutica. A partir de la formulación líquida es posible crear una superficie bioactiva en los implantes dentales que acelera la osteointegración de los mismos.

El plasma rico en factores del crecimiento (PRGF) previene la pérdida de hueso después de una extracción o de una intervención de quiste maxilar.

El coágulo de PRGF constituye una matriz tridimensional de fibrina y componentes celulares empapados en factores de crecimiento. Con este rellenamos las cavidades contribuyendo a que se regenere el hueso adecuado pudiendo posteriormente colocar los implantes dentales con una base osea correcta. Contribuimos a regenerar hueso ya perdido.

Cuando realizamos la extracción de empastes de amalgamas hay que seguir un protocolo adecuado para prevenir el flujo de vapores de mercurio que se desprende durante el procedimiento.

Establecer una rutina de pretratamiento: terapia de guelación oral, una planificación nutricional, la ingesta de suplementos vitamínicos y otros procedimientos de desintoxicación que ayuden a eliminar el mercurio del organismo. El tratamiento puede variar según síntomas.

Es importante a la hora de extraer los empastes hacerlo en el orden correcto, extrayendo primero los que tienen mayor carga negativa.

Se debe utilizar dique de goma, un succionador de alto volumen y turbinas de alta velocidad además de un sistema de refrigeración por spray de agua fría.

Proporcionar una fuente alternativa de aire y enseñar al paciente a no respirar a través de su boca durante el tratamiento.

El empaste de amalgama se debe seccionar y quitar en pedazos grandes retirándolos lo antes posible. Una vez extraida la amalgama hay que hacer un lavado de la boca y cambiar los guantes y atuendo de protección del paciente.

Mantener el aire de la habitación puro. Nosotros tenemos un purificador de aire. El dentista y la auxiliar deben de protegerse usando unas mascaras aprobadas con filtro de mercurio.

Es importante que una persona que necesita de tratamientos odontológicos cuide de su alimentación, descanse suficientes horas y que reforcemos su sistema inmunitario. Lo importante es que el paciente este en las mejores condiciones físicas y emocionales para que nuestro tratamiento le afecte lo menos posible.

 

Si quieres saber más sobre la odontología biológica visita nuestra clínica en C/Cotanda 2-1ª planta 46002 Valencia. Horario de lunes a viernes de 09:30 a 14:00h y de 16:00 a 20:00h. Teléfono para concertar cita: 96 344 76 01.